sábado, 24 de agosto de 2013

CHINA (parte 2)

7 de Septiembre: XIAN

Salimos temprano de Pekín, tras 2 cómodas horas de vuelo llegamos a Xian. La guía turística de Xian (se llama Wey) es también muy simpática y se esfuerza en contarnos muchas cosas de su cultura. Por ella hemos sabido por ejemplo, que en Xian los edificios duran 70 años, tras los cuales el Estado los derrumba y vuelve a construirlos (supongo que tiene que ver con las altas tasas de paro de Xian -28%-, ella me ha dicho que son de baja calidad y no aguantan mucho mas tiempo.


la Pagoda de la Oca Salvaje
Como es temprano nos propone visitar la Pagoda de la Oca Salvaje, después comer y por la tarde ofrece una excursión (por 150 yuanes para el conductor) para enseñarnos Xian al atardecer, el grupo duda pero finalmente accedemos y ha sido muy interesante.








la Pagoda de la Oca Salvaje se construyó en 652 bajo la dinastía Tang, comparte recinto con el Templo de la Gracia Maternal (Da Ci’en Si) y un pequeño jardín al oeste, por el complejo es fácil ver caminar a los propios monjes que lo habitan.






al entrar lo primero que encontramos a ambos lados son –las ya típicas- Torres del Tambor y de la Campana y un precioso incensario.
Al Templo se accede por la soberbia escalera el dragón. En un lateral vemos una inmensa campana de bronce sustentada por palos de madera.
Dentro del Pabellón Central está la estatua de Buda Sakyamuni flanqueado por sus 2 consejeros.




En la parte posterior de dicho Pabellón está la Capilla donde se celebra el nacimiento de Buda. Otras capillas laterales guardan representaciones budistas, esculturas, murales de jade, etc

Wey nos dijo que las marcas redondas de quemadura en el cuero cabelludo del monje que estaba sentado allí correspondían a años que llevaba de monje (una por cada año)



Después de la visita, nos llevan a comer, y al hotel a descansar unas horitas, que yo aprovecho para bajar a la piscina y darme una buena sauna.











Visita nocturna a XIAN
Quedamos a las 5 de la tarde para hacer la visita de la ciudad –Wey nos acompañará en todo momento-, es buena hora porque empezamos a verla al atardecer y terminamos en el ambiente nocturno.
Wey tiene mucha razón y hace bien en presumir de su ciudad porque Xian tiene mucho encanto de noche.

Es una ciudad muy divertida, nos ha llevado a varios parques donde se juntan para bailar, en uno nos comenta que los 2 grupos separados que vemos corresponden: 1 a los solteros y otro a los separados y viudos, la gente van allí a conocerse para emparejarse, le pregunté a Wey y me contestó que en esos bailes lo que se busca es pareja estable.

Primero vamos al barrio Musulmán, donde está la Gran Mezquita y aquí empieza el Mercado Nocturno, nos dice que compremos los recuerdos que queramos, salvo relojes –que son muy malos- y guerreros de terracota –que iremos mañana-.


El mercado ha sido divertido, yo he comprado un sello de ónice con mi nombre grabado en Español y en Chino, lo hacen delante de ti y tardan un minuto, empezaron pidiendo 130 yuanes, pero finalmente (tras 2 paseos arriba y abajo al mercado y mucho insistencia por ambas partes) lo he sacado por 45 yuanes, me encanta el recuerdito.

Después siguiendo la ruta, vamos a los parques que he mencionado anteriormente, seguimos viendo la Torre de La Campana y la cercana Torre del Tambor (ambas iluminadas, chulísimas).

Llegamos a la Plaza de las Fuentes (situada al norte del Templo, y frente a la Pagoda), para esperar a que den las 9 de a noche y comience un precioso espectáculo de luz y sonido, es parecido al que otros lugares como el del Bellagio en Las Vegas, pero no porque no sea único desmerece. Es muy bonito.

Seguimos visitando la ciudad por grandes avenidas muy iluminadas que terminan en amplias plazas con estatuas y cuerpos de agua, para terminar en un encantador paraje, se trata de un pequeño lago con edificios de tejados curvilíneos muy iluminados y esculturas muy blancas recortadas hacia la negrura del lago, precioso.No recuerdo los nombres, porque ha sido una visita extensa y me ha quedado un recuerdo global de una preciosa y animada ciudad.



Volvemos ya muy anochecido al hotel, contentísimos del día tan maravilloso que hemos vivido, como aún no he puesto fotos del hotel, dejo aquí lo que vemos desde la terraza de la habitación, está muy agradable. A descansar que mañana toca otro plato fuerte.







8 de Septiembre: XIAN
Nos levantamos temprano y tras el buen desayuno de todos los días. Nos dirigimos al este, 28 km. Nos separan de las fosas de Los Guerreros de Terracota.

Por el camino, alguien ve la pulsera de jade de Wey, y le pregunta, Wey coincide en la explicación con Shun: es una piedra viva que crece con ella, además –dice- con los años ha ido cambiando de color.



Wey nos hace reparar en algo curioso, algunos coches no llevan matrícula, eso es por 2 motivos, unos están dentro del plazo de 2 meses que tarda el Estado en dar la matrícula, pero el más común es porque las roban sistemáticamente, y dejan su número de teléfono para que les llames, así –por la mitad de lo que cuesta una nueva matrícula (creo recordar que son 2000 yuanes y ellos piden 1000 yuanes) la recuperas, en conclusión, los conductores –hartos de que les esquilmen-, ya no llevan matrícula.

Previamente nos llevan a visitar una fábrica donde se siguen moldeando figuras de guerreros con arcilla amarilla, es la típica visita pero me resultó interesante, además compré 2 figuritas de guerreros para casa (baratas no son, pero es el recuerdo artesano que me traigo de los viajes cuando puedo, de Egipto nos trajimos un papiro genuino –no plátano de imitación- comprado en la fábrica, y unas esencias de la fábrica Lafayette en el Cairo, de Murano me traje un collar comprado allí… cuando puedo traigo un recuerdo genuino, y en este caso son 2 figuritas de terracota).



Los Guerreros de Terracota,
un poco de historia: se trata de figuras de tamaño natural moldeadas en arcilla amarilla para la tumba de Qin Shi Huangdi –quien unificó China, hace 2200 años). Sí, sí… el dato es correcto: estas figuras que hoy podemos contemplar –restauradas por supuesto-, se hicieron en arcilla en 210 a.C.

Empezamos por la fosa 1: en ella hay mas de 6000 guerreros dispuestos en formación de batalla, es impresionante estar allí y ver toda esa enormidad, las figuras tienen tamaño real y todas las caras son diferentes ya que eran el vivo retrato de todos y cada uno de los componentes reales del ejército de Qin Shi Huangdi.




Los caballos y los guerreros se han reconstruido a partir de fragmentos, en la parte posterior de la fosa 1 aún se pueden ver fragmentos de cabezas y cuerpos que están en proceso de restauración. Todos las noches, cuando las fosas cierran al público, comienza la jornada laboral de los restauradores que durante toda la noche se afanan en reconstruir lo que salió en las excavaciones.




Nos hace fijarnos en algunos agujeros grandes que se ven entre las filas de soldados, son tumbas relativamente recientes de campesinos que excavaron en ese terreno para enterrar a sus difuntos, antes de ser descubierto en 1974 –cavando un pozo- la maravilla que allí había.

Las galerías de tierra que hay entre las líneas de soldados, estaban techadas con vigas de madera, es impresionante saber que el Ejército de los Guerreros de Terracota han sobrevivido a terremotos, invasiones y muchas mas cosas durante 4000 años, y que sólo estaban cubiertos por vigas de madera. Un milagro.

No quiero explicar la historia de las fosas porque eso se encuentra en cualquier libro, prefiero plasmar mis sensaciones, mis pensamientos viendo aquella maravilla.

He sentido algo similar -casi indescriptible- a cuando me encontraba en la Gran Muralla, sentir que estás pisando, respirando, viviendo un momento único, en el mismo sitio en que centenares o miles de personas ya eran capaces de construir aquellas maravillas -hace miles de años-, y no sólo eso, sino que la humanidad tiene la suerte de poder contemplarlo hoy en día, y hoy estoy teniendo la suerte de tener yo misma esta experiencia, es sobrecogedor.



En la fosa 1 deambulan varios vendedores que te ofrece cajas con 5 Guerreros de Terracota, he comprado una para mi madre y otra para Encarna, es un recuerdito que estoy segura de que les va a encantar.

Cuando se abrieron las fosas todas las figuras presentaban vivos colores (aún hay muestras en las fosas de cómo estaban), pero al contacto con el aire se desvanecieron en poco tiempo.

La fosa 2 alberga caballería y soldados, está en proceso de excavación y es muy complicado porque, así como la fosa 1 está solada por lo que no es imposible entrever restos de figuras de entre toda la arcilla que se encuentra encima del suelo, la fosa 2 no tiene suelo por lo que todo es arcilla y es prácticamente imposible discernir la que corresponde a fragmentos de figuras de la que forma parte del propio suelo.

La fosa 3 está aún sin excavar y se cree que corresponde a lo que debía ser el centro de mando del ejército, con 70 oficiales, la verdad es que ignoro cómo son capaces de tener ese dato pero no lo pregunté –tengo que informarme-.

Xian es llana, y que las pequeñas elevaciones que vemos son túmulos funerarios de la extensa necrópolis de Qin Shi Huangdi (un tirano que empleó a mas de 700.000 personas durante mas de 36 años para construir su necrópolis –de la que los guerreros guardianes son sólo una parte- con 48 tumbas de concubinas que fueron enterradas vivas, así como los obreros que construyeron las tumbas. Cerca del túmulo funerario, se encontraros 2 carros de bronce enterrados en ataúdes de madera, y hoy se muestran reconstruidos. En el hall hay una maqueta con la distribución de los túmulos a lo largo de un vasto territorio, y 1,5 km al este están las fosas.

Estando en la fosa 1 es cuando vimos la anécdota que conté antes: una señora se preparó –el ruidito asqueroso ese- y después escupió con todas sus ganas dentro de la fosa… bien por la preservación del monumento ¡alucinante!.

Y otras 2 anécdotas: como es obvio no se permite tocar las figuras, pero la esposa famoso futbolista se empeñó en hacerse la foto con una figura y puso el brazo sobre el hombro de la figura, momento en el cual la cabeza rodó y se hizo migas de arcilla… ¡en fin, sin comentarios!. La otra anécdota es mas friki aún: un pringao obsesionado con las figuras que se embadurnó para pasar inadvertido y pasó allí toda una noche flipando con el ejército, cuando seguridad se dio cuenta se lo querían merendar… repito ¡sin comentarios!

Visitando la fosa 2, Wey nos ilustra sobre mas costumbres actuales Chinas, ¡es una joya esta chica! Nos cuenta que en todas las ciudades de China están prohibidos los enterramientos (por falta de terreno) y obligatoriamente se utiliza la incineración –salvo para los pueblos agrícolas que sí tienen sitio-, y que ellos son de un pueblo agrícola y cuando sus suegros cumplieron 60 años, su marido y ella les hicieron un regalo que los suegros apreciaron mucho: 2 ataúdes que los suegros colocaron en su propio dormitorio y engalanaron, cambiaron el raso y cuidaron con mucho cariño, ya que iba a ser su última morada.
No lo fue porque –dice Wey- tuvieron la fortuna de cumplir 80 años, y ella y su marido pudieron regalarles otros 2 ataúdes mejores aún. Otra nueva y gran diferencia entre las culturas orientales y occidentales.

Comemos cerca en un restaurante precioso y con aparente lujo -como siempre-, donde yo aprovecho para comprar el imán de Xian (un guerrero arrodillado) y después nos llevan a recorrer la Muralla por encima.



La Muralla de Xian
la Muralla es el otro gran atractivo de la ciudad,construida en 1370 se conserva intacta, es un rectángulo de 14 km en torno al centro urbano, tiene 12 m de altura y 18 de espesor. Aunque la imponente muralla que vemos hoy no es sino la sombra del bastión que –bajo la dinastía Tang- rodeaba los 78 km2 de Chang’an (nombre de Xian en la época de la dinastía Tang), este perímetro se construyó mucho después -1370- y sólo guardaba el recinto del Palacio Imperial.



Xian fue la capital de once dinastías durante 4000 años. Los chinos remontan su origen al tiempo del mítico emperador Amarillo (2200-1700 a.C.), que hizo de esta la capital, Xian alcanzó su apogeo con la dinastía Tang por ser punto clave en la Ruta de la Seda.
De ahí que resulte tan imponente tener la oportunidad de poder pasear hoy día por encima de esta muralla. Se puede acceder por varios sitios, pero mejor por la Puertas Sur (que fue por la que entramos nosotros).





Cada puerta tiene 3 partes, la exterior para defender la ciudad, la intermedia con un pequeño patio donde los atacantes se quedarían indefensos sin salida y hoy en día sirve para que los turistas hagamos monigotadas metiendo la cabeza para parecer 2 soldados de guardia... y la interior. La entrada la custodian unos soldados ataviados con vistosos trajes de época.

Una vez arriba vemos un pequeño grupo bailando (para ellos cualquier sitio es bueno, además aunque digo “baile” en realidad es mas bien “expresión corporal” oyes se basan en movimientos suaves y acompasados de los brazos a medida que dan vueltas despacio o dan pequeños pasos)

Se puede recorrer el paseo de ronda a pie o en bici, y claro, casi todos elegimos la bici.Y allá que nos fuimos las 10 bicis, por toda la muralla, lo primero que vemos son las Torres de la Campana y del Tambor, mas allá está el Barrio Musulmán, a lo largo de la muralla vemos 7 pabellones que componen el Museo de Bosque de Estelas, y mirando hacia abajo se ven los barrios (Hutongs) bien conservados.

De vuelta al hotel, hoy no tenemos ninguna chuche para cenar, así es que nos decidimos a bajar y explorar los alrededores en busca de alguna tienda de comida, en Pekín teníamos unas cuantas tiendas y restaurantes de comida rápida tipo Mc Donalds o KFC pegados al hotel-, pero no....,


tras cruzar entre aquella locura de coches (yo no tengo grandes reparos porque ya crucé El Cairo, pero Rocío no para de gritar) y pasearnos la calle arriba y abajo (sin podernos entender con nadie, que ni en inglés ni con gestos de “comer” entienden lo que buscamos) terminamos tomando un pan de pita relleno de algo en un puesto callejero… menos mal que parecen verduras, pero… no quiero ni pensarlo.

A propósito del lenguaje de gestos, resulta que es difícil entenderse porque ni se parecen los gestos que utilizamos, por ejemplo para comer, beber, dormir… no lo entienden. Me habían contado una pareja (grandísimos amigos míos: Mercedes y Enrique) que hace años –cuando ellos estuvieron por ahí- preguntaban por un determinado templo y todo el mundo les contestaba con cara seria y cruzando los brazos poniendo las manos en el hombro contrario… hasta que finalmente comprendieron que ese gesto significa “cerrado” para los chinos. Después yo he llegado a entender que el gesto que yo les hacía -buscando restaurante o al menos tienda de comestibles- ese de juntas las yemas de los dedos y dirigírtelas a la boca o el de dirigirte el pulgar a la boca simulando beber una gran cerveza… no hayan sido capaces de saber qué les preguntaba, veamos… ellos comen con palillos (debía haber hecho el gesto de llevarse palillos a la boca) y comen en pequeños vasos que acercan a su boca con 2 dedos (no con nuestro gesto que lo mismo vale para beber que para hablar por teléfono sólo cambiando la dirección del pulgar). Pues eso, que ni en el lenguaje gestual nos parecemos. Costumbres.

La mañana siguiente nos levantamos prontísimo porque hemos quedado en el lobby del hotel a las 5 de la mañana, ya que nuestro avión para Guilin saldrá a las 8 de la mañana.

En el trayecto hasta el aeropuerto voy sacando fotos desde el autocar porque no deja de sorprenderme lo bien cuidadas que están las carreteras de Xian, a ambos lado y en la mediana hay jardines con preciosos y frondosos parterres, de hecho compruebo que son las 7 de la mañana y ya hay jardineros en todos sitios. Ahora caigo en que las de Pekín también estaban muy cuidadas (creo que fue a partir de las Olimpiadas cuando se lavó la cara a la ciudad y las ajardinaron).




9 de Septiembre: GUILIN (con visita a DAXU)
Llegamos a Guilin y nos recibe nuestra simpática guía “Anita”, como es temprano nos ofrece –por 150 yuanes para el conductor- la excursión a un pueblo llamado DAXÚ, y aceptamos.


Durante el trayecto en autocar no paro de hacer fotos a las picudas montañas que se ven a ambos lados (no en la misma carretera, algo alejadas aunque tampoco mucho). Sé que son las formaciones kársticas apuntadas “Fengcong” que dan la fama a esta zona del río Li, y que en el crucero veré mucho mejor, pero estas son las primeras que veo y me gusta mucho.

Vemos un cementerio a orillas de la carretera, y nos extraña porque en Xian nos dijeron que estaba prohibido enterrar, Anita nos explica que la zona de Guilin es rural y por tanto hay tierra de sobra, de modo que aquí sí están permitidos los enterramientos.

Anita nos instruye sobre mas costumbres Chinas, nos cuenta que ella procede de un pueblo rural, y que -según el régimen comunista Chino- nadie es dueño de su tierra, la tierra es del Estado, pero la cede a los campesinos, cada persona puede acceder a 2000 m2 de tierra para cultivarla, incluso los recién nacidos pueden optar a ese terreno, a cambio deben dar al Estado el 15 % de lo producido en cada cosecha, siempre, salvo cuando por un problema de fuerza mayor ningún campesino obtiene buena cosecha, en cuyo caso no deben pagar nada, pero si un campesino no tiene buena cosecha por su culpa (no por condiciones adversas que hagan mala cosecha general), en ese caso –como no puede pagar con el 15% de producto-, debe pagar con dinero.

También nos dice que los campesinos a quienes les tocan tierras “no fértiles” están de enhorabuena, porque no están obligados a cultivar arroz o trigo (como los de tierras fértiles) y pueden cultivar frutales que dan mas dinero.

DAXU
es un pueblo de la era Song cuya empedrada calle principal conserva todavía muchas casas de más de un siglo de antigüedad. A las afueras pervive un bonito puente Quig.





Alguien de la excursión pide ir al servicio, y el único que hay está en un puesto de policía –es para ver el puesto-, porque Daxú es una calle principal y poco mas, pero es interesante porque te permite conocer cómo viven los chinos en las zonas rurales,


aunque algunas casas están algo enfocadas hacia el turismo porque venden baratijas, recuerditos, etc., la gentes siguen viviendo allí (en esas casas que nos permiten ver y haciendo exactamente eso que les vemos hacer… aunque casi se reduce a nada)

Vemos cómo un señor machaca brotes de soja hasta conseguir leche de soja, el olor me resulta algo raro y eso que en mi dieta no tomo leche animal sino leche de soja, pero el olor es diferente.




De aquí tengo una anécdota: Ángeles ha conseguido por 30 yuanes una tortuga de madera que al abrir el caparazón tiene una brújula, está costrosa pero por el precio la lavará muchas veces y la dejará como nueva. En la tienda del hall del hotel de Guilin la vemos, piden 400 yuanes y cuando preguntas por ella te la rebajan en ese momento a 180 yuanes. A los 2 días –en el mercado nocturno de Guilin, la consigo yo –perfecta- por 25 yuanes tras el regateo.

Otro dato: en China casi no se toma leche animal (es muy cara) sino leche de soja (muy barata), mira… ¡lo contrario que en España!. Otro tema son las frutas: allí son muy caras (salvo la sandía que es mas asequible) por lo que casi no toman fruta.

Y entramos en lo a mí me parece una especie de museo etnológico que reúne todos los utensilios del campo y el mobiliario de una casa típica.



Vemos una farmacia china, eso sí me ha gustado, allí te muestran los distintos brebajes y venenos, animales disecados cuya raspadura de piel se utiliza en pócimas, nos muestra la técnica de las ventosas, la moxa, etc.



Saco una foto de una mamá amamantando discretamente a su bebé, la curiosidad de la foto es como siempre el traje del bebé con la ranura que va de alante a atrás, es la única foto que me he atrevido a sacar porque –aunque la intención es simplemente mostrar la diferencia educacional- lo cierto es que por nuestra propia educación, hoy en día nos cuesta mucho sacar fotos de un nene con sus atributos genitales al descubierto (al menos me cuesta a mí) pero es otra diferencia educacional que quiero plasmar, así es que me decidí a sacar esa única foto (que me perdone el nene).

Daxu está a orillas del río Li, nos acercamos a la orilla, en la foto se aprecian las montañas picudas al fondo, explicaré las montañas cuando mañana narre el crucero por el río Li.





La verdad es que a mí personalmente esta visita no me ha gustado mucho esta visita porque –como hemos comentado algunos compañeros de viaje- es como si te trasladaras a las aldeas de España de hace 50 años, no tiene mucho mas interés, de hecho Elsa ha comentado que en su pueblo algunas casas de gente muy mayor siguen siendo así, así es que el interés ha sido escaso –bajo mi punto de vista, que a otros sí les ha gustado-.









La Cueva de la Flauta de Junco
Después nos llevan a la visita de La Cueva de la Flauta de Junco.


Es una visita curiosa por lo espectacular de la iluminación a base de neón, aunque no reviste mas importancia que la de una cueva (que en España tenemos muchas), pero bueno… es curioso ver la iluminación.





A los Chinos les gusta mucho el colorido y las luces, así son capaces de convertir una cueva (con unas formaciones rocosas preciosas –por otro lado- pero sin mas interés) en una visita turística, pero bueno… no deja de ser curioso porque no había visto nunca una cueva convertida en un escenario tan singular. Me ha gustado por la curiosidad.
Además el sitio en el que está enclavada es muy bonito, has de subir bordeando la ladera de una pequeña montaña por un camino de piedra cubierto por una especie de pérgola de hierro, y es justo reconocer que el paisaje que se ve desde allí es precioso, de un verde frondoso con un pequeño lago y las montañas puntiagudas al fondo del marco.




Desde allí nos llevan al hotel que –como en los demás que hemos tenido- es un precioso 5 estrellas y desde el gran ventanal de nuestra habitación podemos contemplar el lago que lo tenemos enfrente. Muy bonito. Y a comer.









excursión en barco por “los 4 lagos”
nos ofrecen una excursión en barco por “los 4 lagos” que nos permitirá ver la pesca con cormorán, cuesta 200 yuanes, la gente discrepa un poco pero finalmente decidimos hacerla todos juntos.













Llegamos anocheciendo ya, y ha sido un paseo curioso, vamos pasando a través del Lago de los Abetos (donde se ven 2 Pagodas iluminadas –la del sol y la de la luna-), el Lago de los Pinos (donde está la llamada “Isla del Amor), el del Laurel (con recreaciones de otoño en flor), y el del Dragón de Madera (con casas que imitan las de la dinastía Shin).


durante el trayecto se iluminan 3 escenarios donde se pueden ver 3 grupos étnicos de baile (que lo cierto es que no están muy conseguidos, casi ni se esfuerzan por aparentar que tocan o bailan, es un poco turistada lo de los grupos étnicos).



En conjunto es un paseo muy tranquilo y muy agradable, en donde además sí que podemos ver la curiosidad de la pesca con cormorán,








se trata de una técnica de pesca propia del río Li, consiste en que el pescador va en una balsa de bambú y lleva consigo 2 cormoranes amaestrados atados por las patas a la balsa, que continuamente están zambulléndose y pescando




(consiguen peces con tanta facilidad y tan rápido que alguien del grupo bromeó con que probablemente escondidos en el río había buzos que le daban el pez, porque es increíble la rapidez con que suben a la balsa con el pescado en el pico),




pero el tema es que el cormorán tiene una lazada en el cuello para evitar que se trague entero el pez, así es que el pescador se lo saca apretándole un poco el cuello -sin esfuerzo- y lo deposita en la balsa. Casi de inmediato el cormorán vuelve a zambullirse… y así hasta que dejamos de verlos.


Por cierto, que como es una atracción turística, los pescadores se acercan hasta casi tocar el barco, de hecho a mí –que llevaba la ventanilla abierta para hacer fotos- me mojó el cormorán cuando el pescador me lo puso casi en la cara para que le sacara la foto.

Nos vamos al Mercado Nocturno –lleno de baratijas y recuerditos- y después me voy con unas chicas a cenar a un KFC. A dormir que hoy a sido un día muy luminoso, je,je.






10 de Septiembre: GUILIN
Hoy tenemos programado una excursión preciosa, de hecho era uno de mis lugares imprescindibles para hacer el viaje, si no hubiera incluido el Crucero por el río Li, no estaría yo aquí.





El motivo: el crucero del río Li es único, es como las cataratas del Niágara o el Cañón del Colorado, una experiencia que sólo puedes tener en un sitio determinado. Los cruceros van desde Guilin a Yangshuo,




va atravesando un paisaje que parece salido de un típico grabado chino, ese que todos conocemos de memoria: el río cristalino y las montañas picudas a ambos lados.








El curso del río tiene poca profundidad, y avanza entre imponentes riscos kársticos con extrañas formas (son las montañas puntiagudas que nombraba en otro párrafo), en cuya base se asienten las aldeas y los bosques de bambú tan típicos de la China meridional rural.

Los nativos siguen surcando las aguas en largas balsas de bambú, algunos se emplean en la pesca con cormoranes (que ya expliqué), otros se acercan –y de hecho logran subirse- a los barcos de turistas para venderles sus frutas (lichis principalmente).

Dura unas 5 horas, es un trayecto precioso, te asignan una mesa determinada aunque casi nadie las ocupa –salvo para el momento de comer, tipo buffet bastante rico y copioso, incluido en el precio-, casi todos los turistas a los pocos minutos de zarpar estamos ya en cubierta, que es desde donde se aprecia mejor el paisaje, se siente la brisa, y se disfruta mucho mas del crucero.

Se van pasando por sitios donde las montañas reciben nombres según su apariencia, así se pasa por los “Dientes de Dragón”, “El Pico del Portaplumas”, “la Colina de la Tropa del Elefante”, “el Pico de la Cola del Pez”, la colina de Los 9 Caballos”.

De vez en cuando aparecen los llamados “bueyes de agua” un animal que yo no conocía, son bueyes que viven en el agua, y de hecho muchas veces están ocultos porque les encanta bucear, me ha sorprendido.

Y finalmente llegamos a destino, desembarcamos en un pueblo llamado YANGSHUO.






El Mercado de YANGSHUO, el mejor mercado de todo el viaje pero solo nos da una hora para comprar. Aquí me he comprado un foulard muy bonito y bien regateado, un collar de cristal amarillo, y la joya de las compras (que íbamos buscando desde España) un térmico North Face absolutamente bien imitado, en la calidad de los tejidos, la costura, los complementos… todo y por un precio irrisorio. No encuentro camisetas para JC, seguiré intentándolo en otros sitios.

En Yangshuo nos espera el autocar para devolvernos a Guilin. Y ya en Guilin cada cual se plantea la noche como quiere, nosotras nos vamos a pasear –como anoche- por el mercado nocturno, me he comprado un conjunto de pulsera y pendientes “brillantoso” a mas no poder… ja,jaaaa… bueno, me ha gustado y me lo he comprado, además del imán de Guilin, y varias camisetas para Juan Carlos, que por fin he encontrado.


11 de Septiembre: SHANGHAI

Tras un vuelo cómodo llegamos muy temprano a Shanghai. Nos está esperando nuestro guía –(cuyo nombre en español es Carlos), la anécdota graciosa es que, en todos los aeropuertos nos han esperado con un cartel con el nombre del touroperador “Destino China”, y aquí no lo vemos… es que en el cartel pone “Maria José y grupo de 13”, ja,ja,jaaaaa…. Anda que no ha habido chufla con el tema, yo –que soy amabilísima- les he permitido a todo el grupo montar en mi autocar, ja,ja,jaaaa… ¡qué ocurrencias!.

Ya desde el autocar vemos que Shangai es otro mundo mucho más industrializado y Occidentalizado. Carlos nos dice que hay unos 6000 edificios de mas de 30 plantas, sí, no es un error -6000, de mas de 30-, nos informa de que los taxis tienen muchos colores, pero que debemos tomar siempre amarillos, blancos o azul celeste, y siempre pedir que pongan el taxímetro (debemos decir “meter”), y evitar en lo posible los rojos y azul marino que son privados, mas caros y menos regulados.


También nos ilustra sobre algo que ya nos habían dicho en Pekín: generalmente los hoteles no tienen plantas que terminen en el nº 4 (no existe la planta 4, 14, 24) porque la entonación del número 4 es similar a la entonación de la palabra “muerte” (cosa curiosa, teniendo en cuenta la cultura que comentaba unos párrafos antes, lo de regalar ataúdes y ponerlos en el dormitorio… está claro que bajo nuestro manera de pensar hay diferencias sutiles que se nos escapan), sin embargo les gusta el 8 porque les suena como "suerte".

Le pregunto acerca del robo de matrículas, y contesta que ahí no pasa eso, mas bien es el robo de móviles de última generación y cosas así, pero sin rescate… estamos en Shangai. Nos propone para esta tarde –a última hora- un paseo nocturno en barco que dura 1 hora aproximadamente, pero el precio no le interesa a nadie y decidimos tomar el barco por nuestra cuenta.

Primero comemos en un restaurante que tiene la particularidad de que no es un gran salón, sino que cada grupo está en una sala cerrada, es decir que nosotros 13 estamos en un cuartito para nosotros solos, además en Shangai permiten fumar en casi todos los sitios.

Templo de Buda de Jade
Tras comer, nos llevan al Templo de Buda de Jade, es el mas célebre de Shangai. De estilo Song, luce en el tejado las típicas estatuillas y campanillas que ahuyentan a los malos espíritus, y aleros con pronunciadas curvas, y grandes incensarios.

En él viven un centenar de monjes, con lo que es frecuente poder asistir a sus oraciones, me ha gustado muchísimo estar ahí en esa sala del Templo Budista con la Comunidad de monjes asistiendo a su ritual, es una experiencia distinta que no sé si volveré a tener la oportunidad de repetir



Nos comenta el guía que los monjes cobran mucho por serlo, así es que algunos viven allí unos cuantos años y después se van –eso sí, con buenos coches y propiedades-, le preguntamos por qué no lo había hecho él, y contesta que ya es viejo para eso porque entran con menos de 12 años.










Tiene 3 pabellones comunicados por 2 patios:

el primero es el Pabellón del Rey Celestial y acoge la representación de 4 reyes celestiales (2 a cada lado).



El Gran Pabellón de la Magnificencia alberga 3 encarnaciones de Buda de madera dorada sobre el altar central, flaqueados por 10estatuas de deidades menores también de madera dorada a cada lado.






La bandas de seda rojas con toque amarillo son oraciones colgadas del techo. Además pueden verse los dos instrumentos rituales habituales: la campana y el tambor.

y la Cámara de los Budas de Jade (en el primer piso, entrando ya en el verdadero templo) atesora la primera estatua de jade de un buda recostado de aproximadamente 1 metro de largo (que no es posible fotografiar)


y otro Buda sentado tallado de una única pieza que pesa 3 toneladas y mide 1,95 metros y tiene incrustaciones de ágatas y esmeraldas (del que no tengo fotografía porque está prohibido, y además es imposible hacerla furtivamente porque hay muchos ojos pendientes de los visitantes que pasamos en grupos por un estrecho corredor ¡una pena lo de la foto! Pero permiten fotografiar otro Buda recostado –copia del primero, pero de casi 4 metros de largo- que Singapur regaló al Templo en 1991.


Y nos llevan al hotel, desde el autocar hago fotos a gente que camina en pijama, bicicletas cargadas hasta el límite de lo imposible, y otras curiosidades que de nuevo me hacen pensar en lo diferentes que somos. Por el camino nos comenta la política de “hijo único”, si 1º nace una niña se permite otro para dar opción a que esta vez haya mas suerte, pero nada mas, la gente con recursos da a luz fuera del País, pero no los puede inscribir por lo que –a efectos Gubernamentales- no tienen los derechos familiares que les corresponden. Lo que me ha sorprendido es que dice que como tanto él como su novia son hijos únicos, ellos sí pueden tener hasta 2 hijos (supongo que es en el caso de que la primera fuera niña).


el hotel es precioso como todos, lujoso, de habitaciones amplias y con buenas vistas desde el gran ventanal).

Tras un descanso, la excursión se divide -habitualmente se están haciendo 2 grupos: 3 parejas que les gusta salir a cenar y ver otros sitios, y nosotras 7 (una madre y sus dos hijas, dos amigas de Alicante, Rocío y yo).

La verdad es que me quedo con ganas de ir con las chicas porque se van a la c/ Nanjing y después irán al Bund, incluso puede que atraviesen el río y lleguen al Pudong. Pero Rocío está cansada y no quiero dejarla sola, y le acompaño al Mercado de la calle Nanjing 580 porque quiere comprarle un bolso y un térmico “North Face” a su hija. El Mercado de la calle Nanjing 580 es un sitio para olvidar, sucio, te siguen por los pasillos tirándote de los brazos, se enfadan en el regateo… y –debo decirlo- huele a pis supongo que es porque allí en casi todos los puestos hay familias jóvenes con bebés y nenes correteando, pasando así todo el día, al ser un sitio cerrado con poca ventilación no me extraña que huela tan rancio, encima no hacen buenos precios… en fin, lo que digo: una experiencia para olvidar.

Al día siguiente me ponen los dientes muuuuy largos… han recorrido la calle Nanjing, han llegado al Bund, y… ¡han hecho el crucero en barco!... me hubiera encantado hacerlo pero ya no da tiempo porque sólo queda una noche y la utilizaremos para subir al edificio alto del Pudong. ¡Qué rábia! Bueno…

12 de Septiembre: SHANGHAI
El Bund
Hoy vamos al Bund. Desde que aterricé sentí que Shanghai es Manhattan Oriental, pero estando aquí –rodeada de tanto rascacielos, en plena zona financiera- confirmo mi primera impresión. Hasta tienen un toro similar al de Wall Street, en el que ¡por supuesto me hago foto! Así tengo foto en los dos toros (el de Manhattan y el de Shanghai), je,jeeee.

El Bund lo componen una hilera de edificios art-decó de finales del XIX y principios del XX que albergan bancos, oficinas, hoteles, clubes… todos de la época colonial de Shanghai, como símbolo del poder comercial de Occidente.




Así encontramos preciosas fachadas que corresponden al Banco de Hong Kong y Shanghai (edificio con cúpula), La Aduana (con su reloj encumbrado en la torre cuadrada), el Palace Hotel que está anexionado al Peace Hotel (el del tejado verde),el Banco de China (de estilo años veinte)…y otros de menos altura –pero no por ello menos bonitos- dispuestos entre los citados. Me está encantando Shanghai




el Pudong

desde el paseo que se extiende a lo largo del Bund, te puedes pasar horas observando el tráfico fluvial, y la vista que se pierde y se embelesa en lo que asoma enfrente: el Pudong.

La vista del Pudong –desde la orilla opuesta: el Bund- es maravillosa, es la zona mas cara de Shanghai, se ven perfectamente todo el complejo de rascacielos, -en el extremo mas al oeste- las bolas del mundo


(las fotos nocturnas se han sacado al final de este día, pero como corresponden al Pudong las incluyo aquí)

los 3 grandes edificios emblemáticos:
la Perla de Oriente (es la Torre de televisión, mide 457 metros y tiene un mirador a mitad de su altura), el Jinmao Dasha (de 421 metros, con un mirador en la planta 88), y el Shanghai Fnancial Center (de 492 metros, a donde subiremos esta tarde)



Dejamos con pena el Bund y sus maravillosas vistas, su ajetreado paseo llenito de turistas chinos –con su modo de vestir que a nosotros nos resulta peculiar, todo volantes, encajes y colores, lo que de nuevo nos lleva a pensar en que hasta la moda es completamente distinta respecto a nuestros gustos-, para ir hacia otro sitio que estoy deseando ver: el Jardín Yuyuan y el bazar que lo rodea.



Jardín Yuyuan
Nada mas bajar del autocar, nos metemos por un pequeño parque donde vemos a varios señores sentados hablando entre sí y con jaulas de pájaros, son las mascotas que las sacan a airearse, del mismo modo que en Occidente sacamos al perro, ellos sacan a los pájaros para que vean la calle. Costumbres.






Por el camino a lo largo de ese parquecito, Rocío le compra a un chico unas ruedas para ponerlas en las zapatillas a modo de patín, y al rato descubre que le ha devuelto moneda mala (como le pasó a Rodrigo en el Templo de Verano en Pekín)


Entramos por una suerte de pequeña ciudad, las casas tradicionales de madera con apariencia a las de la dinastía Quin no son antiguos sino que fueron reformadas el siglo pasado, pero están muy bien ambientadas y son preciosas, conforman calles estrechas (llenas de tiendas dedicadas a la venta de souvenir) y plazas despejadas, es un sitio precioso donde curiosear mas allá de las compras, curiosear los tejados, los aleros, los jardines, el paisaje…
El jardín ocupa 20.000 m2 y fue creado hace mas de 400 años por Yunyuan para complacer a su anciano padre -un oficial de alto rango de la dinastía Ming-, y empleó 20 años en su construcción.









uno de los mejores ejemplos del clásico jardín chino, con elementos como:
la Rocalla (considerada una de las rocallas Ming mas logradas -72 agujeros naturales- y la mas grande pues mde 3,3 metros de alto, cuya composición imita los picos, cuevas y gargantas del sur de China),el Muro del Dragón (un muro blanco rematado en el cuerpo serpenteante de un dragón que tiene sólo 4 dedos, ya que 5 sólo puede tener el dragón del emperador),
pabellones vivienda (con muebles de madera), pabellones solitarios tras un cuerpo de agua, y conjuntos de pabellones agrupados, bosques de bambú, estanques con carpas rojas, cuerpos de agua atravesados por puentes y galerías (una larga y ondulante me pareció especialmente bonita), el Puente que lleva al Salón de Té, cuya trayectoria -en zigzag- protege de los malos espíritus que no pueden doblar esquinas.

Comemos en un restaurante allí mismo (como siempre me ha gustado), y terminada la visita volvemos sobre nuestros pasos hasta el autocar. A Rocío vuelven a intentar venderle otras ruedas ¡el mismo chaval que la timó! y se pone a increparlo y llamar a la policía pero el otro (que además vende ruedas y las lleva) pone pies en polvorosa.

Después de comer proponemos a Carlos que el autocar nos deje en la Plaza del Pueblo y a partir de allí seguimos nosotros con nuestro tiempo libre. Las 3 parejas se van a ver algunas cosas, y nosotras 7 otras.


La Plaza del Pueblo
es una extensísima plaza compuesta por plaza y parque, en ella se encuentran el Gran Teatro que tiene una cubierta convexa muy grande, el Museo de Shanghai, el Museo de Are Contemporáneo que es un cubo de de cristal,




el Museo de Arte de Shanghai, en el centro de la plaza hay un lámina de agua que suelta chorros para el disfrute de los mas pequeños, algo mas allá está la Iglesia del Bautismo Piadoso cuya curiosidad es que está abierta a los cultos de todas las confesiones.

Para salir de la plaza nos hemos liado un poco, en vez de retroceder al principio de la plaza para tomar el metro (Linea 2) que está a la entrada de la calle Nanjing, hemos visto un subterráneo ahí mismo pero no es metro sino un centro comercial subterráneo del que no hay manera de salir,


–por un lado- porque casi nadie habla inglés (esto es normal en toda China salvo justo aquí en Shanghai), -y por otro- las confusas señales que direccionan hacia el (2) desde direcciones diferentes, hasta que intuyo que probablemente los pasillos del centro comercial están numerados (como ocurre en USA) y el 2 corresponde al pasillo, un momento de desconcierto hasta que las demás lo ven claro y ya nos vamos hacia la señal de metro, prueba conseguida, je,je….


Shanghai Financial Center
Salimos del metro en la plaza cercana a los rascacielos del Pudong y nos encontramos con este maravilloso espectáculo de rascacielos de cristal. Las fotos hablan por si solas.

Para ir al Shanghai Financial Center debemos circunvalar una rotonda elevada, lo normal es ir hacia la izquierda pero está en obras por lo que te obliga a dar la vuelta entera, gracias a lo cual puedes ver todo el espectacular conjunto.

Y ya estamos en la base del Shanghai Financial Center, este edificio alcanza los 492 metros y es el 3º del mundo, sólo superado por la Torre Taipei de Taiwan (con 508 m) y la Torre Buró de Dubai (con 818 m).
El edificio posee una belleza geométrica sin igual, formado por diferentes fachadas de cristal y simétricas que muestran diferente forma según el ángulo desde el que se mira.


Nos contó Juan que el diseño -único en el mundo, por el que también es llamado “el abrebotellas”en principio era una apertura circular (necesario para amortiguar la presión del viento sobre el edificio), pero cuando el sol asoma tras el círculo se parecía mucho a la bandera de Japón y eso originó duras quejas de los ciudadanos chinos y del mismo alcalde de Shanghai, por lo que se decidió una apertura trapezoidal en la planta 97 donde se encuentra el observatorio mas alto del mundo (a 440 metros en su parte inferior)

El edificio alberga un complejo de oficinas, un hotel, salas de conferencias, un centro comercial y un observatorio. Tiene 3 miradores: el “Sky Arena”, entre las plantas 94 y 95; y arriba el “Sky Walk” con 2 plataformas de observación en las plantas 97 y 100.

Me dijeron que el suelo del mirador era de cristal, tengo vértigo por lo que supuse que no podía subir, pero sólo tiene cristal en el perímetro y en el centro, así es que subí sin problemas, y para pasar de un lado al otro miraba al frente y no veía lo que tenía a los pies y así pude disfrutar de las vistas que son una maravilla, la guinda la puse cuando me quise hacer la foto que se hacían las otras, sentada sobre el cristal del perímetro, tengo cara sonriente pero no veía el momento en que terminaran de encuadrar la foto, porque reconozco que mientras sonreía para la foto no paraba de pensar “por Dios que el cristal no se rompa, que no se rompa….”. Miedos infundados pero que te hacen pasar un rato regular, pero bueno… ahí tengo mi foto para la posteridad, sentada en el cristal del Shanghai Financial Center y abajo y de frente todo el centro financiero de Shanghai. Espectacular.

Terminada la visita nos separamos, Rocío y yo vamos a la calle Nanjing y terminaremos en el Bund, ellas estuvieron por allí ayer tarde, incluso tomaron el barco, que yo finalmente no podré por falta de tiempo, bueno, alguna cosa tiene que faltar siempre, me hubiera gustado, debí ir ayer, pero no pasa nada.


La calle Nanjing
está considerada la principal arteria comercial de Shanghai, se divide en 2: la Este que va desde la Plaza del Pueblo hasta el Bund y la Oeste desde la Plaza del Pueblo hasta alcanzar el límite de los 10 km que mide la calle. Nosotras ayer estuvimos en el Oeste, y hoy vamos a la zona peatonal y mas entretenida de Nanjing (el Este) llena de buenos comercios cuyo mayor interés para mi es el toque chino que tienen (los letreros, los neones… me encanta)

Acabamos de nuevo en el Bund, le propongo a Rocío invitarle a una cervecita sentadas en una de las terrazas de este precioso y animado paseo y nos sentamos a disfrutar de la vista, la gente, el clima, los neones… todo es perfecto.

Saco una foto curiosa, veo como –frente a nosotras- para un coche y sale una mamá muy elegante que abre la puerta trasera a la hija (unos 8 años), la nena se baja los pantalones y tranquilamente se pone a hacer pipí en la acera, -en la distancia no distingo para dada la postura espero que sea niña y sea pipí, porque la alternativa es aún peor- la mamá espera paciente y cuando acaba vuelven a subirse al coche y aquí no ha pasado nada. ¡Vamos, como nosotros con nuestros perros!. Costumbres.

Dejo a Rocío en la mesa y subo los pocos peldaños desde los que se ve el Pudong, antes de sentarnos ya tenía luces, pero ahora…. Es espectacular, el Pudong -con todos los rascacielos iluminados- es una preciosidad, unas cuantas fotos más para el recuerdo, y nos volvemos al hotel contentas. Tomamos un taxi celeste, pedimos “meter” y nos deja sin problemas en el hotel.


13 de Septiembre: SHANGHAI

Últimas horas en Shanghai y queremos aprovecharlas. Queremos ver el Templo Jing’an, llegar al Centro de Exposiciones para verlo de cerca (la vimos cuando llegamos a Shanghai) y recorrier nuevamente el Jardín Yuyuan. Hacemos el check-out, dejamos las maletas en recepción, y tomamos un taxi que nos llevará al Templo.

Templo Jing’an

Nada mas bajar del taxi, nos sorprende la fachada de tan espectacular templo, llena de alerones, rematada en una de sus esquinas con una torre dorada estilo pagoda, es una preciosidad de templo, por otro lado de unas dimensiones considerables.


Desde el patio sorprende el contraste entre el Templo y los rascacielos de cristal de las inmediaciones, salen unas curiosas fotos. Se trata de un patio central alrededor del cual se distribuyen diferentes salas que albergan figuras budistas, bandas doradas de oración, etc.


En el centro del patio vemos 2 grandes incensarios de bronce y otro elemento –también de bronce- usado para pedir deseos, los fieles arrojan monedas y deben entrar en los agujeros para que se les cumplan los deseos.

El Templo Jing’an -o de la Tranquilidad- data de las dinastías Ming y Qing, fue el templo budista mas rico en la década de 1930 y hoy es uno de los cultos mas venerados de Shanghai.


El pabellón central, al cual se accede por una escalera de granito tallada con dragones en su primer tramo y con flores en el segundo, guarda la estatua de Buda sentado mayor del país (con 3,8 metros), además de una gran campana de cobre de la dinastía Ming que pesa 5 toneladas y mide 6,2 m de alto, y un tambor realizado con piel de vaca de 2,2 metros de diámetro.

Recorrimos toda la galería superior que lleva a distintas salas, en algunas hemos visto alguna estatua budista,










y tras una puerta –abierta de par en par, pero con un letrero de que no se permitía la entrada a los turistas- hemos visto algo extraño a lo que hemos sacado foto: una pared que parece formada de pequeñas cajitas amarillas, me da la impresión de que deben ser cenizas o algo similar porque en cada cajita podemos ver fotos de gente, algunas tienen flores, y en la base hay una decoración floral como la que tenemos nosotros en nuestros cementerios.






Centro de Exposiciones de Shanghai
Caminamos un poco hasta la fachada del Centro de Exposiciones de Shanghai, una de las escasas reliquias de la pasada influencia soviética, y como aún no he visitado Rusia, pues mira… así veo de cerca una fachada soviética típica.

Y ¡ojo al dato! Lo que nos hemos encontrado al lado de la verja del Centro de Exposiciones. ¿Somos diferentes o no somos diferentes?


Desde aquí, tomamos el metro hasta la estación del Museo de Ciencias, a cuya salida se encuentra el Mercado de las Copias. Nada que ver con el de Nanjing, este está bien y no huele raro, otro tema son los precios (el doble de caro), por lo que finalmente no compramos nada, a mí me gustó un bolso pero no regateaban lo suficiente, y Rocío no pudo comprar la North Face, se contentó con unos imanes.




Jardín Yuyuan

Terminamos en Yuyuan, ayer era fiesta y había mucha gente, hoy hemos podido verlo mucho mejor, cruzar sin agobios el puente en zigzag que permite el acceso a la casa de té, queríamos comer allí pero se nos ha hecho tan tarde que debemos conformarnos con un paseo algo apresurado, comprarnos una cerveza porque estamos sedientas, y tomar un taxi que nos devuelva al hotel.

Llegamos puntuales al hotel y ¡hala! al autocar, después vimos que no hacía falta tantas prisas porque hemos llegado a las 15h al aeropuerto y el vuelo sale a las 18h (3 horas de espera, ¡uf!), yo voy sin comer pero Loly y Patricia me ofrecen una manzana y un croissant y con eso tendré mas que de sobra.

Y ahora empieza el regreso, 22 horas de aeropuertos y aviones, sí, sí, 22h, las 3 de espera en el aeropuerto de Shanghai, el vuelo entre Shanghai y Pekín, la espera en el aeropuerto de Pekín, y las 11 horas y media de vuelo hasta España, en total llegamos a las 6,30h de la mañana (hora Española) que se corresponde a las 13h (hora China), Air China es cómodo pero aún así es mucho tiempo, pero... bueno, he llegado cansada, con jet-lag, algo enferma por el aire acondicionado, pero absolutamente feliz, este el mejor viaje que he hecho hasta el momento. NI HAO CHINA

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