ALICANTE (y alrededores), VALENCIA, MURCIA

ALICANTE: Me gusta mucho porque me parece una ciudad alegre, limpia, y acogedora.

Tiene varias playas, la que mas he disfrutado del caso urbano es la de El Postiguet, aunque particularmente prefiero la Playa de San Juan, pero eso va en gustos. Otras playas de Alicante son la de la Albufereta, de la Almadraba, y algo retirada la del Saladar.





Parques, además del famoso de la Explanada de España que supone un paseo delicioso, pudiendo observar los yates ya que está a borde del mar, pegado al puerto deportivo (en la foto superior derecha, vista del puerto deportivo y de la playa del Postiguet desde el Castillo de Santa Bárbara), el suelo está compuesto por mas de 6,6 millones de teselas de marmol, hay muchas sillas plegables de madera que el ayuntamiento coloca para poder disfrutar del buen tiempo en la Explanada, además tenderetes con artesanía, etc.

Otros parques menos conocidos, como el canalejas que tiene ficus centenerios, el Paseíto Ramiro, la Ereta, y algo mas retirado el Palmeral (no confundirlo con el famosísimo Palmeral de Elche, este es de Alicante y muy reducido), el Palmeral me gusta mucho porque tiene una ria artificial, un puente de madera... es agradable.

Monumentos y Museos: empezando por el Ayuntamiento, y muy cerca el precioso edificio Carbonell situado en la Explanada, el Casino, Casa de Brujas, Castillo de Santa Bárbara (fotos aquí) y el inacabado de San Fernando, la Concatedral, la Iglesia de Santa María, La Diputación, Convento de las Agustinas, Palacio Maisonnave, Palacio Gravina, varios Museos como el Museo Arqueológico (MARQ) con exposiciones temporales interesantes, allí he visto una pequeña muestra que trajeron del Museo Británico (yo la había visto ya allí, pero desde luego es muy interesante tener la oportunidad de acceder a colecciones sin tener que viajar, el Yacimiento arquelógico de Lucentum, etc.



Playa de San Juan: reconocida por turismo como una de las mejores playas europeas, tiene 4 km de longitud y unos 100 metros de ancho, comienza en el Cabo de la Huerta y termina en la playa de Muchavista, Muchavista pertenece a Campello y tiene 3,3 km de largo y una anchura de unos 80m, las dos playas se continuan sin interrupción, por lo que se habitualmente a toda la playa se la denomina con el genérico Playa de San Juan.

arena dorada y muy fina, y en la misma arena: lavapiés, aseos, restaurantes, quioscos, zonas náuticas, zonas deportivas, y zonas lúdicas para niños y adultos.

En la foto estoy con mi queridísima amiga Lucia y el fotógrafo ocasional es su marido Pedro, somos amigos desde hace casi 20 años y les quiero con el corazón -me consta que es recíproco-, está tomada en Marzo de 2010, vienen a visitarnos a menudo, cosa que les agradezco en el alma.

Se puede disfrutar de una panorámica maravillosa: arena, palmeras y mar, y en la línea de costa destacan -perfectamente reconocibles- pueblos algo alejados: Villajoyosa y Benidorm, la isla frente a Benidorm, y los pueblos enclavado ya en la montaña, con gran parte de la sierra de Aitana perfectamente visible desde la playa, me parece un marco incomparable.


El Cabo es el final de la playa, y allí es donde se ubica el faro, es una zona rocosa, con casas unifamiliares en su mayoría, que carece de arena, son grandes losas las que se adentran en el mar, en algunos sitios bastante profundo. Lo frecuentan muchos pescadores cuando no hay bañistas, y es tradicionalmente zona nudista.

la playa de San Juan es residencial y vacacional, aunque cuenta con todo lo que se pueda pedir, no sólo en cuanto a comercio y ocio se refiere, sino a todo lo necesario para vivir cómodamente, hay Hospital, además de un ambulatorio, una inmejorable comunicación tanto con Alicante como con Campello, Villajoyosa, Benidorm, etc.


A espaldas de la playa de San Juan, encontramos el campo de golf llamado "Alicante Golf", de 18 hoyos, diseñado por Severiano Ballesteros. Es un campo urbano, denominación que se da a los campos de golf abiertos y grandes que ocupan gran parte de zonas urbanas de la ciudad. Alrededor de cada hoyo se han edificado cientos de casas unifamiliares, todas ellas con unas vistas fantásticas al hoyo correspondiente. 
Me enamoré de esta playa con 12 años, he seguido veraneando allí siempre que he podido, toda mi vida he querido vivir en la Playa de San Juan.

El Campello: a diferencia de la playa de San Juan, El Campello es un pueblo, con el sabor a casas de pueblo y gente del pueblo, aunque hablando inglés en muchos casos, je, je. Y por supuesto, nuevas construcciones estupendas de pisos con todas las comodidades.

Es un pueblo que me gusta para vivir, es tranquilo, tiene una buena playa (aunque honestamente a mí me gusta mas la de San Juan, pero esa es mi opinión, otros piensan que mejor Campello, para gustos los colores, je, je).

Y por ser pueblo, tiene otra vida, otro ambiente, la playa de San Juan tiene mucha vida porque mucha gente reside allí pero generalmente, o son personas jubiladas que pasean y disfrutan de su bien merecido tiempo libre, o si son gente que trabaja generalmente lo hace en el muy cercano Alicante (del que sólo lo separan 7 km. y unas carreteras fantásticas, y un trenet que tarda 10 minutos en llegar a Alicante). Esto hace que el ambiente de Campello es la vida cotidiana de vecinos en su quehacer normal, mientras que el de San Juan Playa es la vida de las ciudades vacacionales. Y por cierto, nótese que siempre especifico San Juan PLAYA, ya que es muy distinto a San Juan Pueblo, de hecho la Playa es un distrito de Alicante, mientras que el pueblo -como es obvio- es un pueblo no un barrio de Alicante. La foto está tomada en diciembre de 2009, y estoy con mi gran amiga Mari Carmen, somos amigas desde hace mas de 30 años (así, sin anestesia, ja,ja), y nos queremos con ese sentimiento profundo que sólo puede surgir con el paso del tiempo y las vivencias compartidas, viene a vernos a menudo y me encanta que lo haga. 


Cuevas de Canelobre (Busot): a 24Km. de Alicante, con sus 70 m. de bóveda figura entre las más altas de España, (las fotos son de Turismo de la Comunidad Valenciana, ya que está prohibido hacer fotos en el interior), y desde el exterior domina una vista panorámica estupenda hacia la montaña "Cabecó d'Or".









La Torre de les Maçanes:: En la Sierra del Rontonar a 42 Km. de Alicante, con unas fantásticas vistas desde el llamado "Mirador de la costa" o desde la Torre almohade que data de los siglos XII y XIII,





Castell de Guadalest: Entre las Sierras de Aitana y Xortá. Es una fortaleza que se alza a mas de 500 metros sobre un peñasco rocoso, con unas vistas fantásticas al Embalse de Guadalest. Se puede visitar los restos del castillo (a los que se accede desde el interior de la Casa Orduña, la Casa Orduña es una casa solariega del S. XVIII, y los Orduña eran los antiguos señores de todo el valle.




El Castell de Guadalest conserva un casco antiguo que ha sido declarado conjunto histórico artístico, se puede ver la mazmorra árabe del s.XII y el algibe(entrada libre), también tiene museo de ministuras, museo de arqueología y museo de etnología. Me gusta mucho este pueblo, además de por la espléndida panorámica a la sierra, y por los monumentos mencionados, me gusta porque está muy preparado para el turismo, todo muy limpio, con tienditas de souvenirs... muy pintoresco. Por cierto, comimos en un restaurante con unas vistas estupendas.



Las Fuentes del Algar: En Callosa d'en Sarriá, las conocí hace muchos años cuando estaban mucho mas salvajes, ahora he vuelto y está muy diferente, sigue un trazado de 1,5 km. a través de un camino muy bien definido, que bordea el río y las pozas y llega hasta la presa. En verano se llena de bañistas (lo sé por las fotos y el recuerdo que tengo), pero ahora en Febrero estábamos solos, y me alegré de poder disfrutar tranquilamente del ruido del torrente de agua y los saltos de agua, no duró mucho el paseo, ya que es corto el camino y en este tiempo, una vez visto pues ya no hay nada mas que hacer, quisimos comer por allí pero la mayoría de los restaurantes estaban cerrados, supongo que por la temporada en que estamos.

Me gustan mucho Las Fuentes del Algar, y no para bañarme sino para verlas durante un ratito - la verdad es que en media hora ya estás fuera, pero como no está demasiado lejos (unos 50 km) y además la entrada es muy barata, volveré a ir en algún momento.





Polop de la Marina: A 12 km. de La Nucia, en la parte alta quedan restos del castillo (aunque -honestamente- nosotros no vimos gran cosa), y la Plaza de los Caños, con una fuente con 220 caños, uno por cada pueblo de Alicante.





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VALENCIA

Estando tan cerquita de una ciudad tan preciosa-, ¡cómo no ir de vez en cuando!, ya sea para quedar con otros amigos viajeros, o para ver la última exposición de Sorolla (que anteriormente ha estado en Madrid), o simplemente para pasear y disfrutarla. Además en breve, una buena amiga mía trasladará a Valencia su lugar de residencia, con lo que –supongo- que iré de vez en cuando por allí.
Valencia es una ciudad luminosa –igual que Alicante-, sus monumentos se realzan gracias a esa luz mediterránea, que descata los detalles de la piedra de la filigrana, del mármol…

Si llegamos en tren, nada mas salir vemos la Plaza de Toros, y siguiendo la avenida Marques de Sotelo, llegamos a la Plaza del Ayuntamiento, donde además del Ayuntamiento –como es obvio-, encontraremos al otro lado de la plaza el edificio de Correos.

Desde aquí propongo –en vez de seguir subiendo hasta la Plaza de la Reina, desviarse un poco a mano izquierda para llegar al Mercado Central y deambular un poco por alrededor (foto izq)

pegado al Mercado Central, encontramos la Iglesia de los Santos Juanes (foto dcha).

y de paso visitar por dentro el edificio que está enfrente –la Lonja de la seda-, (fotos dcha)

Ahora ya sí, callejeando un poquito en dirección hacia la derecha, llegaremos a una grandísima plaza, muy decorada y muy abierta, la Plaza de la Reina, bajo mi punto de vista, este es el centro neurálgico de Valencia, me gusta mucho esta plaza, por su amplitud, y sobre todo por los monumentos que la rodean: la Iglesia y Torre de Santa Catalina (foto izq) y la Catedral (foto centro, al fondo).

Salimos de la Catedral, y nos dirigimos a su parte trasera, la Plaza Almoyna, y aquí podemos ver la Cripta Arqueológica de San Vicente Mártir.

A muy pocos pasos entramos en la Plaza de la Virgen, adonde da la fachada posterior de la Catedral, la Basílica de la Virgen de los Desamparados, y al otro lado, varios Palacetes interesantes: el de la Generalitat, la Diputación, y el de Bayla.

Seguimos subiendo hacia el norte y llegamos a la Plaza de los Fueros, donde sobresalen por derecho propio, las Torres de los Serranos.

Estamos en la antigua ribera del río Turia, hoy convertido en parque urbano forestal “el jardín del Turia”, así es que podemos pasear u poco por esta gran zona verde.

Desde los Serranos, un paseo mas concienzudo nos puede llevar a visitar mas iglesias, museos y baños, la cercana Iglesia del Carmen, o el -también cercano aunque en dirección opuesta- Palacio de Benicarló.Y bajando desde este, llegamos a la Iglesia de San Juan del Hospital y la de Santo Tomás y San Felipe Neri, ambas cerca de la Plaza de San Vicente Ferrer.

Bajando un poco mas, llegamos a la Plaza Colegio del Patriarca, con la Universidad, el Palacio de Boil Arenós, la Iglesia de El Patriarca (foto dcha), y la Iglesia de San Juan de la Cruz. Visitar el Museo de Cerámica, ubicado en el Palacio del Marqués de Dos Aguas (foto izq), resulta interesante no sólo por las piezas sino por el propio edificio, que es espectacular

Y callejear sin rumbo, de vez en cuando te sorprenden edificios singulares (como el del Banco de Valencia), o descubrir en la plaza Lope de Vega, una fachada estrechísima (como las que buscamos con curiosidad, en tantas otras ciudades Europeas)

Y por último, acercarnos al Puerto Nuevo, y deleitarnos con la vista del mar, desde el vanguardista edificio “Veles e Vents”.

Como colofón, hacer una pequeña incursión a “la Ciudad de las Artes y las Ciencias”, y a “L’Oceanografic” de los que no puedo hablar porque por el momento no lo conozco, pero estoy deseando hacerlo, en breve haré una escapadita sólo para visitarlos.

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MURCIA

Mi gran amigo de la niñez –Clemente- vive con su esposa en Murcia, -amigos desde los 13 años, formábamos parte de un grupo de 8 amigos, de entre los cuales Clemente y yo éramos inseparables-. Con 12 años en el colegio me mandaron hacer un álbum de Historia del Arte, y todas las madres nos compraron unas bolsitas que contenían varias láminas de diferentes épocas. A mí me gustó tanto que continué elaborándolo durante muchos años, llegué a hacer 13 álbumes –que por supuesto aún conservo- ayudada por Clemente, y aunque ya no contenían sólo láminas preciosas y a color –como fue el primero-, fue un hobby muy entretenido. Toda mi familia, Clemente y yo, buscábamos láminas y fotos de cualquier muestra de arquitectura, escultura o pintura, que pudiera recortar y pegarla al álbum (tras haberme documentado sobre ella, para poder escribir una reseña sobre el estilo, el autor, etc). Y Clemente pasaba muchas tardes de los fines de semana en casa, ayudándome a hacer los álbumes de arte.

Al cabo de algunos años de separación (motivada únicamente porque la vida cotidiana te va llevando inexorablemente aún en contra de tu voluntad, y la lejanía geográfica hace el resto), nos hemos vuelto a encontrar, y todo ha seguido como en la niñez, con la grandísima suerte de que las parejas hemos congeniado de maravilla, y hoy en día Clemente es uno de los mejores amigos de mi marido, y a su mujer la apreciamos de todo corazón porque es una persona maravillosa.

Ahora mantenemos contacto muy frecuente –casi diario-, y nos vemos con mucha asiduidad porque nos separan muy pocos kilómetros.

Murcia es la gran desconocida, me de la impresión de que le falla el marketing, porque tiene mucha vida en su Casco Histórico, muchos monumentos interesantísimos, y una gente muy acogedora, y me da la impresión de que el resto de España no lo conoce suficientemente. Lo que digo, la gran olvidada.

La Universidad (fotos arriba) tiene fachadas de distinto estilo arquitectónico, y un patio interior con un admirable claustro. Si vamos mirando con ojos de turista, descubriremos por doquier primorosos edificios en cualquier calle del centro.

Llegamos a la Plaza donde está ubicado un ficus centenario.

Y seguimos hasta el Monasterio de Santa Clara la Real, data de los siglos XV al XVIII y si entramos a la iglesia podremos ver un espléndido retablo barroco.

Desde allí nos dirigimos a la Iglesia de Santo Domingo barroca (una de las 16 iglesias barrocas que hay en Murcia Capital), y- a través de un arco-, llegamos a la plaza de Julián Romea, donde nos hemos tomado un café en una cafetería muy chula. Tras la pausa, volviendo sobre nuestros pasos enfilamos la calle Trapería

y es uno de los ejes del casco antiguo, muy agradable de pasear, y cuenta con palacetes impresionantes –de difícil foto porque la calle es tan estrecha que no se pueden encuadrar bien-, en ella encontramos el Casino, el Palacio Almodovar, etc

Seguimos hacia el Conjunto Catedralicio, La Catedral de Santa María es de una belleza inusitada, tiene una elaboradísima e imponente fachada barroca,

otra fachada no menos impresionante de estilo renacentista, la torre campanario, la Capilla de los Velez adornada con una cadena perimetral elaborada en piedra que es sencillamente espectacular.

En el interior encontramos verdaderas maravillas, el retablo, la sillería del coro, las capillas laterales… es una auténtica joya.

Desde aquí podemos dirigirnos hacia la Plaza del Ayuntamiento y pasear por el río.

Esta es la ruta principal que podemos hacer por Murcia, -según el plano turístico- para conocer bien la ciudad nos quedaría por visitar algunas iglesias del los siglos XV y XVIII, y varios Palacios diseminados por la zona centro, pero hemos paseado por la zona más emblemática de Murcia.

Como en el resto de entradas. Si alguien quiere dejar un comentario, será muy bien recibido.

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